La Confederación General del Trabajo (CGT) de Galicia manifiesta su rechazo a la pretensión del consorcio empresarial, ALTRI, de instalar en Palas de Rei una macroplanta de fibras textiles y celulosa.
SP del Comité Confederal de CGT-Galicia
CGT reclama la paralización del proyecto por los efectos devastadores que su instalación y actividad provocará sobre uno vasto territorio -desde la comarca lucense de la Ulloa a la Ría de Arousa-, causando un daño irreversible a la actividad agropecuaria y forestal, al medio ambiente y a la salud pública en toda Galicia.
ALTRI es la segunda industria papelera de Portugal donde tiene tres factorías, reiteradamente sancionadas por varios episodios de contaminación del río Texo. Con el plan en Ulloa, asociada con la compañía gallega Greenalia, ALTRI planea poner en marcha el complejo industrial sobre un terreno de 336 hectáreas (diez veces mayor que lo que ocupa Celulosa de Pontevedra), con capacidad para producir anualmente 400.000 toneladas de pasta de celulosa y otras 250.000 de tejido lyocell, basado en la fibra de madera.
Estos objetivos declarados de producción demuestran que la población gallega del extenso área afectado se enfrentará de hecho a la instalación en el centro de Galicia de una macrocelulosa, que reproducirá, multiplicándolos, los daños ambientales, de salud pública, contaminación y a la actividad agropecuaria y forestal sostenible, causados por la actividad de la pastera Celulosa de Pontevedra.
El contubernio económico-político: el ‘lobby’ a lo que recurrió ALTRI para tramitar su proyecto ante las administraciones españolas es Tilde Public Affairs, que lideran los exministros José Blanco, exsecretario de Organización del PSOE con José Luis Rodríguez Zapatero, y Alfonso Alonso, expresidente del PP del País Vasco con Mariano Rajoy. Este lobby ‘conseguidor’, Tilde Public Affairs, logró que la Xunta de Galicia escogiera el proyecto de ALTRI como una de las iniciativas susceptibles de financiación a través de los fondos Next Generation de la Unión Europea -podría recibir más de 250 millones de dinero público, el 30% de la inversión inicial- declarándolo ‘proyecto estratégico y de utilidad pública para Galicia’. Al igual que consiguió que el proyecto fuera aprobado inicialmente por todos los partidos políticos del parlamento gallego, por más que las tres factorías que ALTRI tiene en Portugal, acumulen ya varias denuncias y sanciones por contaminar el río Texo.
Privatización y agonía del río: La propia empresa, ALTRI, asegura que la planta extraerá del río Ulla, en el embalse de Portodemouros, la impresionante cifra de 46 millones de litros de agua diarios. Una vez usado en el proceso industrial tan enorme caudal, la planta ‘devolverá’ diariamente al río Ulla unos 30 millones de litros a una temperatura de 27º. El que significa que, un centenar de kilómetros aguas abajo, alcanzarán la Ría de Arousa, pero ya contaminados, como demuestra la experiencia de ENCE en Pontevedra, afectando riberas, riegos, recursos hídricos, subsuelo acuático y capa freática.
Degradación del bosque gallego y eucaliptización: La producción de biofibra y pasta de celulosa previstas, precisará consumir 1,2 millones de toneladas anuales de madera de eucalipto, lo que, sin ninguna duda, agravará la desastrosa “eucaliptización” de Galicia, impuesta en el último tercio del siglo XX por la localización de Celulosas en la ría de Pontevedra.
Agresión a un área de máxima protección ecológica: Además, las 360 hectáreas que ocupará el complejo se sitúan a las puertas de la Sierra del Careón, un área de máxima protección ambiental incluida en la Red Natura 2000, que alberga varias especies en peligro de extinción, endemismos únicos en el mundo y 17 especies que, según la normativa de protección internacional, deben ser objeto de medidas de conservación.
Reclamo de los puestos creados: Como excusas falsas para justificar la construcción del descomunal proyecto, la propaganda de ALTRI argumenta, por una parte, que cumple con la normativa ambiental legal, y por el otro la «creación de cientos de puestos de trabajo directos e indirectos”. Ambos argumentos son igual de mentirosos, por cuanto la producción real de su actividad no será otra que el abrumador daño ecológico, sanitario y social descrito, con su secuela de destrucción de innumerables puestos de trabajo en el sector primario de la cuenca del Ulla y ría de Arousa.
Por estas razones, la CGT, en defensa del medio ambiente, el territorio y la salud pública, comparte la movilización general contra tan dañino proyecto, incorporándose a las acciones colectivas dirigidas a su paralización en este o cualquier otro lugar de Galicia.
A Coruña, Mayo, 2024
SP del Comité Confederal de CGT-Galicia
